La respuesta a su pregunta sobre si una persona puede bautizarse en casa se compone de dos capas. La primera es que el bautismo es un anuncio público de que una persona ha elegido aceptar la verdad de Dios y andar en Sus caminos, y simbólicamente ha elegido lavar sus pecados. Siendo este un anuncio público, uno no puede bautizarse solo. Debe ser en presencia de otros como testigo (Romanos 10:9-13). Jesucristo fue bautizado en público por Juan el Bautista (Mateo 3:13-17). Jesús no necesitaba lavar ningún pecado porque Él nunca había pecado, pero lo hizo para darnos un ejemplo a seguir.
La segunda capa es que un pastor ordenado o un anciano, a quien se le hayan impuesto las manos para bendecir, debe ser el que dirija el bautismo. La imposición de manos es el proceso utilizado para ordenar públicamente a una persona en un ministerio legítimo. “No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con la imposición de las manos del presbiterio” (1 Timoteo 4:14; 2 Timoteo 1:6). Y las calificaciones de estos líderes religiosos se enumeran en 1 Tim. 3:1–14 y Tito 1:5–11.
La Biblia muestra que el Señor nombró discípulos, ministros, obispos y diáconos para llevar a cabo este santo servicio. La razón de ello es la necesidad de contar con hombres instruidos para enseñar a aquellos que decidieron seguir al Señor. Para poder bautizar a otros, estos hombres deberían poder cumplir la gran comisión de Jesús: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado” (Mateo 28:19-20). Estos líderes religiosos deben ser capaces de atender las necesidades espirituales de las personas con discreción, conocimiento y sabiduría en su ministerio.
En Su servicio,
BibleAsk Team