Confesión pública
Acerca de la confesión pública, el apóstol Pablo escribió a la iglesia en Roma: “Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación” (Romanos 10:9-10).
Salvación por medio de la fe
En la cita de Romanos 10: 9-10, Pablo no está diciendo que una persona es salva simplemente por una confesión pública de su fe. Es cierto que la Biblia enseña que “porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios no por obras, para que nadie se gloríe” (Efesios 2:8-9). Y es cierto que la salvación no se ve afectada por el esfuerzo humano porque es un regalo y no puede ser comprada con dinero ni tiene precio (Isaías 55: 1; Juan 4:14; 2 Corintios 9:15; 1 Juan 5:11). Las obras no son una causa sino un efecto de la salvación (Romanos 3:31). Los cristianos no hacen obras para ser salvos, sino porque son salvos. Las obras son los frutos de la salvación.
La confesión: una señal de un cambio interior
Cuando Pabla habla sobre creer «con el corazón», él señala que la fe implica un cambio interior completo. Y esta transformación de carácter resulta en justificación y rectitud (Romanos 3:22; 5: 1). La prueba externa de la transformación interna es la confesión de la boca, la defensa de lo que se cree que es verdad. La voluntad de confesar a Cristo en palabras y acciones siempre ha sido la prueba de fuego del verdadero discípulo (Mateo 10:32; Lucas 12: 8; Apocalipsis 3: 5).
La importancia de la confesión
En la época de Pablo, el creyente que aceptaba a Cristo y lo confesaba como Señor, a menudo era llevado a la persecución y, posiblemente, a la muerte. Esta confesión pública era un indicio de una experiencia genuina. Las palabras “serás salvo” no muestran una condición para la salvación por la confesión pública, sino más bien la verdad de que alguien está dispuesto a confesar al Señor incluso si eso lo lleva a la muerte.
Conclusión
Pablo en Romanos 10: 9-10 no está diciendo que la confesión pública es una condición necesaria para la salvación. Simplemente está confirmando que cuando un creyente en Cristo confiesa a Cristo como Señor, con pleno conocimiento de que puede seguir la persecución, esa persona demuestra que su experiencia es verdadera.
En Su servicio,
BibleAsk Team